La
semana pasada en la redes sociales se difundió un video en el que grabaron a varias personas descargando mercancía
de una camioneta con los logos y leyendas de la Secretaría de Desarrollo Social
y de la Cruzada contra el Hambre, para introducirla en un negocio de comida, que
luego se supo es propiedad del coordinador de Desarrollo de Zonas Prioritarias
de la delegación Tamaulipas de la Sedesol.
El video desató agresivas críticas contra lo que inmediatamente se calificó como un acto ilegal e inmoral por el
desvío de los insumos destinados, según los lineamientos del programa, a atender las carencias alimentarias de la gente más pobre del país, para entregarlo al
negocio de comida “Siempre Natural”, cuyo propietario es Raúl Coatzin Hernández
Moreno, también ex presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción,
delegación Reynosa.
Seguramente forzado por el escándalo,
el subdelegado federal de Sedesol en la entidad, Herbey Ramos, justificó el
traslado de los víveres a ese establecimiento comercial, ubicado al poniente de
Reynosa, asegurando que ahí se elaborarían
emparedados para los beneficiarios de Sin Hambre, ya que “las cocineras –de los
comedores comunitarios- descansaron con motivo de la Semana Santa”.
Si así hubiera sucedido, el
funcionario tendría que explicar porque ellos, los empleados de la Sedesol, violando las reglas de operación del programa Sin
Hambre tenían en su poder los insumos de los comedores comunitarios, cuando
estos deben estar bajo resguardo de los integrantes de la Comisión de Alimentación
del comité que opera cada comedor.
Dichos lineamientos señalan que esos comités
serán los beneficiarios de los subsidios que el gobierno federal entrega para
la operación del programa. Las reglas
obligan a que el Comité Comunitario proponga a la Asamblea General una Comisión
de Alimentación, la cual será la encargada del funcionamiento del comedor.
Entre las responsabilidades de esa comisión
–integrada por miembros de la comunidad- están las de almacenar y resguardar los
insumos que se adquieren para la operación del comedor.
Entonces, la explicación para
justificar lo que se difundió en el video, que se hizo viral en las redes
sociales, no hace más que levantar mayores sospechas sobre la manera en que se
administran los recursos destinados para operar el mencionado programa.
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