El dirigente de la Sección 30 del Sindicato
Nacional de Trabajadores de la Educación, Rafael Méndez Salas, con la actitud
chocarrera que le caracteriza se dijo sorprendido porque fue incluido en los
primeros lugares de la lista de candidatos a diputados federales de
representación proporcional que el PANAL registró en la segunda circunscripción
electoral.
“Yo no sabía” fue una de sus respuestas. Ante
la insistencia de los reporteros sostuvo su dicho. Aseguró que desconocía que
la dirigencia nacional de ese partido lo había registrado en la segunda
posición de la referida circunscripción electoral, con lo que su llegada a la
cámara baja está prácticamente asegurada.
Lo relativamente destacable en su registro como candidato plurinominal es
que Méndez Salas sigue exhibiéndose como el mentiroso que es. Aunque solo él
sabe la razón por la que faltó a la verdad, su simulada sorpresa por la
candidatura que le regaló la dirigencia nacional del partido resulta risible.
Como cualquiera en sus circunstancias, para ser incluido en la lista de candidatos por la circunscripción electoral a
la que pertenece Tamaulipas, el dirigente estatal del magisterio debió cumplir con los
requisitos que establece la Ley General de Instituciones y Procedimientos
Electorales.
Entre las obligaciones que el artículo 238 impone
a los partidos para presentar las solicitudes de registro de sus candidatos
está la de acompañarla con la aceptación de la candidatura por parte de quien
será propuesto al cargo de elección
popular. ¿No sabía? ¡Qué ridículo!
Las causas que lo llevaron a mentir sobre su
registro como candidato de representación proporcional, son intrascendentes para
el público. Más allá del entorno
partidista el tema no reviste mayor importancia.
Donde la conducta poco escrupulosa del
dirigente de la Sección 30 del SNTE si tiene implicaciones graves es en el ámbito educativo.
Méndez Salas es de los privilegiados por el
ejercicio abusivo del presupuesto público. Como se sabe está comisionado al
sindicato e indebidamente recibe su sueldo como maestro con plaza en la escuela
primaria “Gral. y Lic. Alberto Carrera Torres” de Ciudad Victoria.
El flamante candidato del PANAL también es
aviador en el sistema de secundarias técnicas del estado, en el que tiene asignada una plaza de Inspector General
de Secundaria Técnica.
La incompatibilidad
geográfica entre sus dos lugares de trabajo evidencia claramente lo irregular
de su situación laboral. El dirigente magisterial detenta la plaza de inspector
-074828 E040100.0280034- ubicada en el
municipio de Reynosa, a más de 300 kilómetros de su otro centro de trabajo.
Lo peor de esta anómala y grave situación es que en los
documentos públicos donde aparece con la plaza que notoriamente lo exhibe como
aviador, Méndez Salas fue reportado como
personal comisionado al SNTE.
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