WIKI LEAKS: BALCONEADA MEXICANA

 Inmediatamente después de que Wiki Leaks reveló miles de documentos elaborados por personal diplomático estadounidense en el servicio exterior, en los que se incluyeron reportes generados por la embajada de Estados Unidos en México, el gobierno mexicano  condenó su divulgación.

La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) calificó tales documentos como parciales e inexactos porque, dice el comunicado que emitió con relación al tema, contienen criterios “subjetivos acerca de “momentos puntuales” fuera del contexto en que ocurrieron.

Es entendible esa postura sobre  las filtraciones de Wikileaks porque  muestran el verdadero nivel de relación que tienen funcionarios del Poder Ejecutivo con representantes estadounidenses.  Una subordinación que el gobierno mexicano niega pública y categóricamente.

Por eso no mueve a extrañamiento esta descalificación que en el comunicado de la SRE se hizo al contenido de esos documentos.    Una obviedad que no reconocerán las autoridades mexicanas es que esas comunicaciones internas entre la embajada estadounidense y la Secretaria de Estado del vecino del norte, son elaboradas para ser utilizadas en  la toma de decisiones.

Así de simple.   Como dice el refrán “para que tanto brinco estando el suelo tan parejo”. Se trata de reportes que en todo caso reflejan el punto de vista que tienen los funcionarios estadounidenses sobre la situación de México.

Por ejemplo está el documento en el que se solicitan a la embajada en México informes acerca de cómo la guerra contra el narcotráfico, la crisis económica y las derrotas panistas en las pasadas elecciones intermedias afectan al presidente Calderón en lo personal y en su forma de gobernar. 

El documento refiere que se deben recabar informes sobre aspectos relacionados con la personalidad del presidente mexicano.  Con ese propósito se envían una serie de preguntas al personal diplomático estadounidense en nuestro país:

“¿Cómo reacciona el presidente Calderón ante puntos de vista diferentes al suyo? ¿Le gusta debatir con las personas que opinan diferente o prefiere analizar los puntos de vista, esperar un poco y luego responder? ¿Se rodea de personas que tienen una variedad de puntos de vista o prefiere a las personas que le responden “Si señor”?

Sigue el cuestionario: ¿Cómo describe la gestión de Calderón (más la de un hombre de ideas o mediocre? ¿Cómo afecta ese estilo de gestión a los miembros de su gabinete?

La orden de trabajo al personal de la embajada se extiende a una evaluación a los colaboradores del presidente: ¿Individualmente cual es su opinión de Estados Unidos y cuan fuerte es su relación con funcionarios estadounidenses?

¿Cuál es el nivel de relación entre los miembros del gabinete? ¿Tienen rivalidades? ¿Han llegado a tener lazos de amistad?

¿El estrés de trabajo ha afectado la salud de los miembros del gabinete de las áreas de seguridad y economía? Si es así ¿Cómo están manejado ese estrés?

Es claro que esas preguntas abordan aspectos muy subjetivos accerca de los más altos funcionarios del gobierno federal mexicano.  Es obvio.   Tan sencillo que es el cristal con el que los miran.