Como un vulgar ladrón terminó el ahora ex tesorero de la presidencial municipal de Reynosa, Raúl Jiménez Cárdenas, quien abandonó su encargo el último día de 2010 dejando sin el pago de la segunda quincena de diciembre a cientos de empleados municipales.
Unos cinco meses antes de la conclusión del trienio en el que fue alcalde Oscar Luebbert Gutiérrez, para amortiguar las consecuencias de los excesos que cometieron en el manejo del presupuesto, entre otras acciones, sugirió la suspensión del pago de compensaciones a prácticamente todos los funcionarios y empleados del municipio.
Con un descarado abuso de poder violaron impunemente los derechos de los trabajadores. A pesar de que la legislación laboral vigente señala que el salario se integra con los pagos hechos en efectivo por “cuota diaria, gratificaciones, percepciones, primas, comisiones, prestaciones en especie y cualquier otra cantidad o prestación que se entregue al trabajador por su trabajo”, decidieron que dichas compensaciones dejaran de liquidarse.
Aunque la responsabilidad de esos funcionarios cesó el 31 de diciembre pasado, los empleados están en aptitud legal de reclamar el pago de esas percepciones, que por un monto total de 61 millones de pesos estuvieron incluidas en la cuenta 31104 del presupuesto de egresos del ejercicio fiscal 2010 del municipio, ya que el patrón es la persona moral Ayuntamiento de Reynosa.
Pero el problema para quienes además no recibieron el pago de la segunda quincena de diciembre es que prácticamente se quedaron sin posibilidad de reclamo alguno ya que al liquidárseles los primeros quince días del mes y el aguinaldo, también se les hizo firmar el recibo correspondiente a la última quincena del año.
Seguramente las autoridades municipales que iniciaron su encargo el primer día de 2011 recibirán el reclamo de quienes fueron afectados por esta maquinación fraudulenta perpetrada por Jiménez Cárdenas, pero la complicación que enfrentan para justificar su reclamo es que en la contabilidad de ese mes aparecerán los recibos que inocentemente le firmaron a la tesorería.
El ahora ex secretario de Finanzas de la Presidencia Municipal de Reynosa, literalmente se fue por la puerta trasera porque además de esta, la del estribo, cometió múltiples trapacerías en el manejo del presupuesto del municipio.
Sin el destacado futuro político del personaje principal de la película de Luis Estrada, Jiménez Cárdenas parece extraído de La Ley de Herodes.
1 comentario:
por desgracia y para desgracia del popolo las oficinas de los gobiernos en sus tres niveles son autenticas cuevas de ai-las-babas y sus chingocientos ladrones. saludos, gabo
Publicar un comentario